lunes, 30 de septiembre de 2019

El Departamento de Orientación Psicopedagógica en los institutos

Según un apartado del libro "Libro blanco de la profesión docente y su entorno escolar" de Jose Antonio Marina hemos podido reflexionar sobre las funciones del departamento de orientación pedagógica de los institutos. De esta reflexión, hemos concluido:
  1. Los orientadores deben estar en posesión del título correspondiente (Grado en Psicología o Pedagogía). Además deberían realizar un máster de educación específico y realizar un período de prácticas de dos cursos.
  2. No sólo debe existir un curso de orientación en Educación Secundaria, sino que también debería aplicarse a la Educación Infantil y Primaria (donde pueden aparecer muchos de estos problemas).
  3. Siempre se debe tratar de desarrollar las competencias de todos los alumnos. Para ello, los orientadores deben centrar su atención en problemas pedagógicos, problemas de comportamiento, orientación académica o laboral, y problemas psicológicos graves (los cuales deben ser derivados a centros de saludo especializados).
  4. Uso de la hora de tutoría para tratar estos problemas.
  5. Coordinación general entre orientadores y profesores del centro para tratar de detectar y solventar estos casos.Resultado de imagen de el libro blanco de la profesión docente y su entorno escolar




jueves, 26 de septiembre de 2019

La Fundación Tomillo de Carabanchel

Tras el visionado del documental he podido concluir como es totalmente necesaria la presencia de centros como la Fundación Tomillo de Carabanchel, es decir, centros que traten de reorientar y potenciar las habilidades en alumnos que han fracasado en el sistema educativo tradicional por diferentes razones. 
Estos centros se centran más en el desarrollo personal y tienen los contenidos curriculares relegados a un segundo plano. Por ello fijan sus objetivos en cuestiones como la puntualidad o el comportamiento y dejan más de lado los contenidos curriculares.
Además, como ejemplo, la Fundación Tomillo ofrece prácticas en varias empresas que posibilitan la introducción de los alumnos al mundo laboral, e incluso muchos de ellos han podido quedarse en dichas empresas trabajando a través de un contrato.


lunes, 23 de septiembre de 2019

El modelo educativo castellanoleonés como ejemplo

Según el artículo del Norte de Castilla, el modelo educativo presente en la comunidad autónoma de Castilla y León ofrece excelentes resultados que lo catapultan en el famoso informe PISA. Entre sus aspectos fuertes, la docencia castellanoleonesa (Primaria y Secundaria) se caracteriza por ofrecer un amplio abanico de centros bilingües (principalmente de inglés), siendo la comunidad autónoma con mayor porcentaje de alumnos matriculados en programas de bilingüismo. Además, otro punto fuerte remarcado por el consejero de educación Fernando Rey es la lucha por la equidad, teniendo el objetivo de no dejar nunca nadie atrás. Para ello se elaboraron planes de refuerzo que afectaron a un total de 1.731 alumnos.
Todo ello cristaliza en los excelentes resultados, culminando en la Selectividad, fruto de un sistema castellanoleonés que tiene "una enorme calidad combinada con la equidad".
Sin embargo no todo son alegrías. Si bien es cierto que la docencia castellanoleonesa puede servir de ejemplo a nivel estatal, los centros educativos de la comunidad también sufren los efectos de otra realidad: la despoblación del medio rural. Y es que el inicio del curso escolar 2017 - 2018 se saldó con el cierre de cuatro escuelas (tres escuelas de infantil y un colegio de Infantil y Primaria). Esta cruda realidad que asola el medio rural español puede suponer cierto atraso en el ámbito educativo aunque, en mi opinión, el problema no es tanto del sistema educativo en sí, sino que más bien radica en un problema estructural derivado del modo de vida del siglo XXI.

La cultura del esfuerzo en la Educación Secundaria

Existen sistemas educativos derivados de sociedades extremadamente exigentes con sus pequeños y adolescentes. Este es el caso de Corea del Sur, un gigante asiático capaz de reinventarse y fortalecerse tras las el ocaso provocado por la Guerra de Corea. 
El país anfitrión de sedes de grandes compañías como Samsung, LG o Hyundaicapaz también encabeza las listas globales de educación (así lo muestran documentos como el informe PISA). Pero, ¿cual es el precio de todo esto? Jóvenes que pasan desde las 8 de la mañana a las 11 de la noche estudiando y cuyas familias invierten grandes cantidades de dinero en academias extraescolares que se encarguen de pulir y propulsar los resultados académicos de sus hijos. La sociedad surcoreana tiene muy interiorizada la idea de que si no se tiene éxito en la escuela, tampoco se logrará medrar un buen futuro. De esta manera, volviendo a hacer referencia al informe PISA, los alumnos surcoreanos también son los más infelices del mundo.

Sin embargo, esta tremenda cultura del esfuerzo surcoreana contrasta con el caso español, donde la tasa de abandono escolar parece ir en aumento en los últimos años.
Tras un debate en grupo en clase, la conclusión a la que llegamos es que sin tener que poner el modelo coreano como ejemplo, nuestro sistema educativo debería invertir más y mejor en orientación para que los chicos y chicas de este país logren saber que es lo que les motiva. Creemos que el problema no sólo radica en la ausencia de esfuerzo, sino que también el no estar interesado en lo que estas estudiando supone una falta de motivación que provoca dejadez.
En definitiva, si futuros mecánicos no tuvieran que focalizar su atención en asignaturas como Latín, o futuros historiadores del arte no se tuvieran que preocupar por afianzar sus conocimientos en Biología, el esfuerzo que estos dedicarían a asignaturas que realmente les interesan sería mucho mayor y más fácil de hacer.

Presentación: ¿Sapere Aude?


Esta locución latina nace en el siglo XVIII bajo el regazo del filósofo alemán Immanuel Kant en su ensayo "¿Qué es la Ilustración?". 

Hola, soy Endika Elorza y he hecho Historia (más bien cursé el Grado de Historia en la Universidad de Valladolid). Ahora mismo estoy cursando el Master de Educación Secundaria en la UVa para poder llegar a ser docente. 
Tras ser inspirado por mi profesora Carolina en 4º de la ESO - y como futuro docente en Educación Secundaria y Bachillerato - esta locución latina se convirtió en una máxima para mí. 
Ella comenzó el curso escolar repartiendo un fragmento del ensayo de Kant "¿Que es la Ilustración?" con una doble finalidad. En primer lugar trataba de introducir la etapa histórica con la que iba a dar comienzo el curso (la Edad Contemporánea). Por otro lado, Carolina empleó esta locución para transmitirnos su manera de entender la educación. Sus clases no sólo pretendían inculcarnos conocimientos históricos (fechas, personajes, procesos ...), sino que ella quería ir más allá. Consideraba que estaba formando a la sociedad del futuro y, por ello, elevaba el sentido crítico a la categoría de necesidad.
Tras superar 4º de la ESO empecé el Bachillerato de Humanidades, aunque sin tener muy claro que hacer en un futuro aún. En primero de bachillerato tuve otro buen profesor llamado Jesús que vivía la Historia, de nuevo centrado en la Edad Contemporánea. De esta manera, la Revolución Francesa, los nacionalismos decimonónicos, la Revolución Rusa, la Primera Guerra Mundial, la crisis de valores de entreguerras, etc. fueron encandilando más si podía mi amor por la Historia.
Pero en todo este contexto, también supongo que por mi fervor adolescente, uno de los temas que más me empezó a interesar fue la historia del movimiento obrero. Pero ello también se debe a mis raíces familiares, concretamente mi abuelo paterno, que dedicó su vida a la lucha sindical en Barakaldo.
Sea como fuere, mi pasión por la Historia iba fraguando. Sin embargo, llegó 2º de Bachillerato. Todos somos conscientes de la carga de trabajo que conlleva este curso, pero el problema no fue sólo este. Tras haber tenido dos profesores que sí lograron despertar mi interés por la Historia, mi profesora de Historia de España en este curso logró que mi interés por la asignatura decayera. 
Aun así, tras superar la Selectividad, decidí entrar en el grado de Historia en la Universidad de Valladolid.
Para mi sorpresa, y sin querer extenderme, el primer año del grado para mí fue una total decepción. Los años siguientes, con algunas salvedades, tampoco fueron muy diferentes. Profesores desinteresados, temas irrelevantes, libertad de cátedra, ... En fin, en mi cabeza sólo rondaba la pregunta: como futuro docente de Secundaria, ¿sería capaz de recomendar a un alumno/a que siga el camino que yo emprendí? Sinceramente, al menos con mi experiencia en la UVA, no lo creo.
Pero durante mi etapa universitaria también he dedicado gran parte de mi tiempo a trabajar en el mundo fabril. Ello ha contribuido, seguramente motivado por cuestiones ideológicas, a seguir interesándome más aun por la historia del movimiento obrero de nuestro país enmarcada dentro de la Historia Social.
Tras haber terminado el grado, y para completar conocimientos en el área histórica que a mi más me atrae, la Edad Contemporánea, he decidido matricularme en un máster sobre la Historia de España en el contexto internacional durante la Edad Contemporánea.
Y eso es todo, se me presenta un año un tanto atareado, pero también interesante.

Una educación para el 2030 ... ¿Que ha pasado aquí?

Para esta última actividad del blog se propone reflexionar acerca de cómo será la educación en torno a 2030, cuando esperemos que ya todos ...